El dolor en la espalda y el cuello ocurre periódicamente en cada persona. Esto puede deberse a una actividad física reciente, un estilo de vida sedentario o la presencia de patologías graves de la columna.
Para averiguar la causa del dolor y las posibles complicaciones de las enfermedades, debe someterse a un examen médico a tiempo. A menudo, la causa del dolor de espalda intenso puede ser una hernia de disco o un daño grave en la columna debido a una lesión.
En pacientes de edad avanzada, el dolor en la región lumbar se asocia con enfermedades degenerativas del tejido óseo. En el futuro, el desarrollo de la enfermedad conducirá a la necesidad de una intervención quirúrgica, cuando el tratamiento farmacológico no produzca el efecto esperado. Por lo tanto, no debe posponer la visita al médico ni determinar de forma independiente la patología.
Síntomas
Comienzan a aparecer sensaciones dolorosas en la región cervical, luego de lo cual pasan a los hombros y el área entre los omóplatos. En este caso, el paciente tiene dolor durante el movimiento de la cabeza o la articulación del hombro. En el futuro, tales manifestaciones se vuelven más fuertes y la persona siente rigidez al girar la cabeza.
Los principales síntomas de que una persona tiene patologías graves de la columna son:
- entumecimiento de la articulación del hombro y los músculos del cuello;
- sensaciones de dolor periódicas en la parte superior de la espalda;
- tension muscular;
- chasquidos y sonidos característicos de las articulaciones;
- restricción en el movimiento libre del hombro que ocurre después del sueño;
- sensación de hormigueo en los tejidos blandos;
- disparos agudos desde diferentes lados de la espalda;
- malestar alrededor de los ligamentos y el cuello.
Cuando ocurren estos síntomas, una persona comienza a pensar por qué la espalda y el cuello pueden doler y qué se debe hacer para deshacerse de la incomodidad. En tales casos, debe conocer las causas subyacentes y proceder a la terapia a tiempo.
Causas
Las sensaciones desagradables en la región de la espalda y el cuello en la mayoría de los casos ocurren debido a espasmos musculares y subluxaciones de las vértebras. Son bastante difíciles de notar durante un examen general realizado por un médico, por lo que se necesita un diagnóstico más efectivo. A menudo se prescriben tomografías computarizadas y resonancias magnéticas, que visualizan incluso cambios estructurales menores. La primera técnica es adecuada para examinar las formaciones óseas de la columna vertebral, y la resonancia magnética le permite descubrir por qué duelen los músculos y los tejidos blandos.
Espasmos musculares
La razón principal por la que cede en la espalda se considera espasmos musculares. Pueden ocurrir con el tiempo, después de que un pequeño espasmo se convierta en una tensión muscular grave. Los siguientes factores pueden ser la razón:
- estancia prolongada en posiciones incómodas;
- posición incorrecta durante el sueño;
- gran actividad física y acciones activas;
- hipotermia, como resultado de lo cual se producen procesos inflamatorios en los músculos.
Incluso una pequeña corriente puede ser la causa de un espasmo muscular. El uso inadecuado del aire acondicionado y las altas diferencias de temperatura provocan la inflamación del tejido muscular.
Subluxación de las vértebras
En caso de daño mecánico, las vértebras se desplazan hacia la subyacente. Como regla general, este fenómeno se observa en caso de lesiones graves durante accidentes automovilísticos. Las subluxaciones se acompañan de daños en el aparato ligamentoso, tensión muscular e infracción de la cápsula articular. El médico puede reconocer la patología por un dolor intenso durante la palpación, al girar la cabeza y mover el cuello.
Las subluxaciones son tratadas por cirujanos y traumatólogos. Una persona puede ajustar la vértebra de forma independiente, pero solo después de una consulta altamente calificada con un especialista. En casos leves de patología, se prescribe la inmovilización con un collar Shants durante un mes.
Osteocondrosis de la columna cervical
Otra causa de dolor tirante y doloroso en el cuello puede ser la osteocondrosis. Esta es una enfermedad degenerativa de la columna vertebral, que se produce como resultado de trastornos metabólicos. La parte cervical tiene un corsé muscular débil, lo que provoca una gran carga en las vértebras. Como resultado, la arteria vertebral se pinza y no se produce la nutrición necesaria de estructuras cerebrales importantes.
Los siguientes factores pueden servir como causas de la osteocondrosis:
- metabolismo alterado;
- estilo de vida sedentario;
- predisposición genética;
- hipotermia;
- estancia prolongada en posiciones incómodas;
- obesidad.
Para prevenir la aparición y un mayor desarrollo de la osteocondrosis, basta con hacer ejercicios de gimnasia y seguir las prescripciones del médico.
hernia intervertebral
La hernia intervertebral es una enfermedad inflamatoria y degenerativa, que se acompaña de deformación del disco intervertebral y ruptura del anillo fibroso. Los discos intervertebrales desempeñan el papel de amortiguadores, reduciendo el efecto destructivo de las vértebras entre sí.
Con el tiempo, pueden perder su elasticidad y flexibilidad, causando dolor e incomodidad severos. Cuando se produce una hernia intervertebral, el paciente puede experimentar frecuentes dolores de cabeza y musculares. La nutrición insuficiente del cerebro provoca mareos, debilidad y somnolencia constante.
Posibles complicaciones
Incluso los dolores menores pueden afectar la salud de una persona o causar complicaciones graves que requieren una intervención quirúrgica inmediata. Ignorar las enfermedades inflamatorias y degenerativas conduce a patologías del sistema vascular, la aparición de dolores punzantes intensos y la interrupción del cerebro.
Después de que se ocluye la arteria vertebral, la persona experimenta debilidad, fatiga, alucinaciones visuales y otros síntomas. Si el paciente no busca ayuda médica a tiempo, pueden presentarse enfermedades como isquemia cerebral y accidente cerebrovascular. Con el tiempo, pueden ser fatales.
Diagnóstico de patologías
Después del examen por un médico, se prescribe uno de los métodos de investigación de diagnóstico para una comprensión más amplia de la patología. Con lesiones mecánicas y lesiones de las vértebras, se prescribe una TC (tomografía computarizada), que se basa en rayos X. Los rayos X se fijan en todos los tejidos del cuerpo y se muestran de manera diferente en la pantalla del monitor. El especialista recibe varias docenas de imágenes en capas con una imagen tridimensional de las estructuras óseas de la columna vertebral.
El método tiene sus contraindicaciones. Durante el embarazo y la lactancia, es mejor optar por la resonancia magnética (RM), que utiliza ondas electromagnéticas para detectar enfermedades degenerativas y patologías de los tejidos blandos. Los tomógrafos modernos le permiten obtener imágenes de alta calidad de todas las partes de la espalda en unos minutos y descubrir por qué le duelen la espalda y el cuello.
Si el médico sospecha una enfermedad infecciosa del sistema nervioso central, polineuropatía y otras enfermedades del sistema nervioso central de diversas etiologías, se prescribe una punción lumbar. Este método es ampliamente utilizado en neurología. Durante el procedimiento, el paciente recibe anestesia espinal o anestesia espinal cuando al paciente se le inyecta un anestésico en el espacio subaracnoideo. La inyección se realiza lo más cerca posible de las raíces de los nervios espinales.
Tratamiento médico
Cuando aparecen los primeros síntomas, la mayoría de las personas solucionan el problema con medicamentos antiinflamatorios y analgésicos. Para el inicio de un efecto terapéutico, se utilizan los siguientes medicamentos:
- Analgésicos con un efecto analgésico pronunciado a base de metamizol sódico o nalbufina;
- Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos que actúan directamente sobre el foco de la inflamación y alivian eficazmente la hinchazón;
- Relajantes musculares que bajan el tono del tejido muscular y alivian la tensión;
- Pomadas anestésicas y antiinflamatorias de acción local.
El médico puede prescribir tabletas y ampollas, que tienen un efecto inmediato. Como terapia compleja, se prescriben ungüentos o geles que alivian la hinchazón y condroprotectores. Este grupo de medicamentos restaura las articulaciones y tiene un efecto antiinflamatorio.
Procedimientos de fisioterapia
Además del tratamiento farmacológico, al paciente se le prescriben procedimientos de fisioterapia. Puede ser yoga terapéutico, masaje especial o tratamiento con aguas minerales y fangos. Para elegir los ejercicios y procedimientos gimnásticos correctos, debe consultar a un médico que le recetará cursos terapéuticos. En algunos casos, los ejercicios de estiramiento pueden provocar un deterioro, por lo que no se recomienda la fisioterapia sola.
Otro método de tratamiento es la terapia manual. El especialista realiza preliminarmente un masaje manual para preparar los tejidos blandos para una mayor exposición. Luego va a las articulaciones y la columna vertebral. Tales manipulaciones con la ayuda de las manos ayudan efectivamente a mejorar el flujo sanguíneo y aliviar el dolor. Un efecto profundo en los músculos de la espalda le permite eliminar la tensión y la hinchazón.
Algunos especialistas prescriben electroforesis al paciente. Este método se basa en descargas eléctricas constantes que se aplican en las zonas enfermas del cuerpo. El método tiene las siguientes ventajas: reducción del proceso inflamatorio en los músculos de la espalda y el cuello, eliminación del edema y el dolor, disminución del tono muscular, mejora del suministro de sangre a los tejidos de la espalda. El efecto terapéutico se observa después del primer procedimiento.